Control de Servicios – Supervisamos nuestro trabajo

La organización de los servicios de vigilancia, lo que venimos a denominar los sistemas de trabajo se han de realizar bajo la supervisión de un Jefe de Seguridad. De él depende tanto la organización como el control de los mismos.

Este cargo dispone de la información suficiente de cada uno de los Vigilantes de Seguridad, y conoce sus cualidades. De tal forma que la asignación de servicios en la empresa de seguridad que seleccionemos para tí, está convenientemente estudiada.

Una relación fluida entre el Jefe de Seguridad y la plantilla de Vigilantes de Seguridad, permite un ambiente de trabajo ideal. Ello redunda en la prestación de servicios a los clientes. Y facilita el mejor control del servicio posible, una punta de lanza en cualquier empresa de seguridad que se precie. Este tipo de empresas son los que encontramos para tí.

Control de los servicios:

INICIO Y FINALIZACIÓN DEL SERVICIO

Si transcurrido un margen desde la hora de inicio o desde la finalización  del servicio, no se produce el inicio o finalización del servicio se activa  una  alarma que da lugar a la iniciación del PROTOCOLO DE ACTUACIÓN:

 Todas las incidencias que pone en marcha el referido protocolo, quedan registradas, con fecha y hora. Los informes generados por cada contacto, han de estar siempre a disposición del cliente.

CONTROL DE PRESENCIA Y NOVEDADES DEL SERVICIO

Control telefónico de la presencia efectiva del Vigilante en el interior del recinto donde se presta  el servicio:

 El sistema establece una serie de puntos de control, el Vigilante emitirá una señal que se interpreta en el CENTRO DE CONTROL, como justificante de la presencia del Vigilante en dicho punto. Si no se emite dicha señal en el momento previsto el Centro recibe una alarma que da lugar a la activación del PROTOCOLO DE ACTUACIÓN.

 Todas las incidencias quedan registradas, con fecha y hora y los informes están siempre a disposición del cliente.

SEGURIDAD Y PREVENCIÓN DEL SERVICIO

Control de la seguridad de los vigilantes y comprobación de su estado de alerta:

 Muy útil para servicios en lugares peligrosos.

 El Vigilante mantiene contactos periódicos con el Centro de Control, y si esta periodicidad se ve alterada, desde el CENTRO DE CONTROL se genera un aviso que, en caso de no respuesta del Vigilante, se genera una alarma, activando el PROTOCOLO DE ACTUACIÓN.

 Todas las incidencias quedan registradas, con fecha y hora  del inicio y de finalización de la misma, con objeto de poder conocer el momento exacto de la incidencia y de la recuperación de la normalidad del servicio.

 Estos controles no suponen ningún incremento en el coste del servicio, además, el Vigilante puede utilizarlo tantas veces como considere necesario, sin perjuicio de los programado o los que el cliente exija.